Zacatecas, Zac.- “Jesús Reyes Cordero cree en el azar, en la sorpresa, en lo inédito, en lo misterioso, en todo lo que es extremo a la forma creativa” así­ se refirió Ví­ctor Carreón,  secretario Técnico del Instituto Zacatecano de Cultura (IZC) al trabajo plástico de este artista, cuya obra se alojó los muros de la Galerí­a Arroyo de la Plata.

Como parte del programa de exposiciones del XXV Festival Cultural, que fueron inauguradas este dí­a, la Galerí­a Arroyo de la Plata dio cuenta de “Los Campos Magnéticos  si o no?, Biodiversidad” que habla de una etapa especialmente importante de Jesús “Chucho” Reyes Cordero.

í‰sta, dijo Carreón al representar al director del Instituto Zacatecano de Cultura (IZC) “Ramón López Velarde” Gustavo Salinas Iñiguez, “nos permite asociarlo con Harry “Conejo” Angstrom, por su forma de evadirse de las situaciones que pretendan abrumarlo.

Por elección personal obvió detalles biográficos  de Reyes Cordero, pero sí­ habló de la cercaní­a  con “La era de la discrepancia”, a través del grupo SUMA durante la década de los años setenta.

“Se trata de una modesta pretensión de rememorar las expresiones artí­sticas marginales a las corrientes dominantes en las postrimerí­as de los convulsos años sesentas, de los reticentes a la aceptación doctrinal del Instituto Nacional de Bellas Artes, quienes optaron por el trasiego expresivo con reciprocidad en el intercambio de técnicas en las artes plásticas”.

El lenguaje pictórico de Chucho Reyes –añadió- ofrece una policromí­a que nos impide apartarle la vista y menos aún dejar de advertir un momento artí­stico diferente de la otredad.  “Jesús, el nuestro, el pagano, vive en el arte porque así­ lo eligió”.

Por su parte el artista agradeció a los amigos, a los asistentes y a quienes contribuyeron a que esta exposición finalizara a la vista de propios y extraños, y que hoy puede ser apreciada durante el XXV Festival Cultural, en la Galerí­a Arroyo de la Plata.