“CUANDO ME PONGO TRAS LA CíMARA, MIS DEMONIOS OFRECEN LA MEJOR DE SUS SONRISAS”, RAFAEL RANGEL, DIRECTOR DE ‘EL PRINCIPIO DE LA ESPIRAL’

Con gran aceptación por parte de los asistentes, se realizó la proyección de “El Principio de la Espiral”, pelí­cula dirigida por Rafael Rangel, en la segunda jornada cinematográfica de la 3 Muestra Nacional de Cine en Fresnillo (MUNACIFRE).

En la exhibición de la cinta estuvo el Director, quien ante el numeroso público manifestó algunas de las sensaciones que compartió en el trabajo presentado.

“Cuando me pongo tras la cámara, mis demonios ofrecen la mejor de sus sonrisas”, dijo.

Acompañado por la actriz, Francesca Guillén, añadió que es importante dar a conocer a todos el gran trabajo de cine que se realiza en México y cada vez ofrece mejor calidad.

Con tres cortometrajes en su haber, el director michoacano, Rafael Rangel ha conseguido espacios en algunos festivales como: el Festival Internacional de Cine Contemporáneo (FICCO) en la Ciudad de México, a pesar de haber sorteado diversos problemas, entre ellos, la censura.

Sus tres cortometrajes, exploratorios siempre de las fobias, deseos, frustraciones y esperanzas anidadas en el cerebro humano, fueron censurados y cancelada su proyección en México, en el 2007.

“Aunque para mí­ significa que voy por buen camino”, afirmó el cineasta.

En una especie de antologí­a su obra, el propio Director ha creado un DVD que compila las tres piezas que han dado renombre a este creyente del Cine Independiente.

De esta forma, la MUNACIFRE vio engalanada su pantalla con la exhibición de su más reciente obra “El Principio de la Espiral”, que fue realizada en el 2009 con una duración de 108 minutos.

En esta se puede observar el trabajo actoral de Carmen Beato (Mercedes), Ramiro Guerrero (Jerónimo), Germán Valdez III (Jerónimo), Francesca Guillén (Ana), Mario Balandra (padre de Jerónimo), Maripaz Mata (Mercedes, la abuela).

Cabe señalar, que después de siete años de trabajo en el guión y de tres meses de rodaje, el cineasta michoacano independiente Rafael Rangel alcanza a definir un estilo singular en esta historia, sumerge al espectador en la espiral de los conflictos existenciales del personaje central.

“Un joven esquizofrénico que parece desdoblar su personalidad en diversos planos de tiempo, sin embargo, en todos esos niveles, enfrenta el mismo entorno familiar hostil donde la mayorí­a de los personajes parecen haber perdido el rumbo”, detalla la Sinopsis de la misma.

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