EL GOBIERNO DEL ESTADO ATIENDE LOS PROBLEMAS DERIVADOS DE LA SEQUíA

Zacatecas, Zac.- El Gobernador del Estado, Miguel Alonso Reyes, declaró hoy que la situación por la que lamentablemente atraviesa el campo, debido a la sequí­a, demanda la acción y la unidad, y que la administración a su cargo está atenta y cercana a los productores, para atender la contingencia.

Acompañado por Enrique Flores Mendoza, Leonel Cordero Lerma y Enrique Morán Faz, secretario de Desarrollo Agropecuario, Delegado de la Sagarpa, y gerente estatal de la Comisión Nacional del Agua, respectivamente, el mandatario estatal presentó ante los medios de comunicación un informe detallado de la situación que prevalece en el agro.

El Jefe del Ejecutivo Estatal informó que, este miércoles 17, Francisco Javier Mayorga Castañeda, titular de SAGARPA, estará en la entidad, con la sensibilidad humana y capacidad profesional que le caracterizan, para encontrar la mejor forma de brindar recursos para enfrentar los problemas de los productores zacatecanos.

En este tenor, expresó que, actualmente, el programa de siembra y cultivos cí­clicos del estado en las 121 mil hectáreas de riego se desarrolla con normalidad, aunque la ausencia de lluvia y el incremento de temperatura que este hecho propicia obligan a reducir los perí­odos de riego, lo que aunado a la ineficiencia electromecánica del 70 por ciento de los pozos, podrá afectar el rendimiento de los cultivos establecidos en un porcentaje que estarí­a entre el 10 y el 15 por ciento.

Los cultivos de riego aportan 5 mil 900 millones de pesos y son los que demandan la mayor cantidad de mano de obra y, en lo concerniente al millón 100 mil  hectáreas de temporal, la situación se agrava por la falta de lluvias.

La agricultura de temporal, expresó el Gobernador, aporta 4 mil 264 millones de pesos, siendo el 45 por ciento de su producción para autoconsumo.

En referencia al comportamiento del clima, indicó que las lluvias durante junio y julio se han caracterizado por su anormalidad. En promedio, en este periodo se registraron 94 milí­metros, cuando la media histórica es de 212.

Es decir -asentó-, llovió sólo el 44 por ciento del volumen esperado y en lo que va de agosto, mes en el que en promedio se precipitan 117 milí­metros, han caí­do apenas 41 milí­metros de agua, los que representan el 35 por ciento del promedio que se registraba en este lapso.

Al estar por concluir el periodo de siembra del actual ciclo, las escasas lluvias en Zacatecas tienen entre sus efectos, que el avance de esta tarea sea solamente del 66 por ciento.

Bajo estas condiciones, Miguel Alonso fue claro al señalar que se espera la siembra de 830 mil hectáreas, 270 mil menos de la cifra programada de 1 millón 100 mil.

A la fecha, 383 mil 487 mil hectáreas registran la siembra de frijol, de las cuales 252 mil 151 fueron sembradas en fechas posteriores al 25 de julio, lo que representa el 65 por ciento del total programado y, de acuerdo al perí­odo de siembra aún factible, sólo nos queda como opción productiva el establecimiento de cultivos forrajeros.

El Gobierno Estatal, en coordinación con la SAGARPA, ha puesto a disposición de los agricultores semilla para sembrar con forrajes 256 mil hectáreas, cifra histórica en el estado que requirió una inversión gubernamental de más de 200 millones de pesos, señaló.

En cuanto a la ganaderí­a, Miguel Alonso subrayó que la situación es aún más compleja, porque el estiaje tradicional de enero a mayo se ha prolongado, prueba de ellos es que  a la fecha prácticamente tenemos 11 meses sin lluvia y los ganaderos carecen de superficies para el pastoreo de sus animales.

Esta situación es altamente preocupante, ya que de los sectores agrí­cola y ganadero depende el ingreso de más de 150 mil familias, cuyas actividades productivas anualmente generan más de 14 mil 990 millones de pesos.

Por último, el Gobernador dejó en claro que “aun y cuando escuchamos con respeto las voces que demandan que iniciemos el procedimiento para la Declaratoria de Desastre Natural, hoy en dí­a estamos impedidos para hacerlo, por la normatividad y reglas de operación que rigen a este programa federal”.

Los criterios establecidos para llegar a la declaratoria de desastre señalan que las bajas precipitaciones pluviales deberán afectar a cultivos establecidos y arraigados, lo que hoy no sucede puesto que actualmente apenas se están realizando las siembras.

Agregó que, en lo que compete a la Ganaderí­a, la normatividad establece que la época de secas para esta actividad comprende de diciembre a abril del año inmediato posterior, por lo que los plazos aún no se cumplen.

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