PLAN FAMILIAR… SALVA TU VIDA Y TU PATRIMONIO

Por: Juan Antonio Caldera Alaniz / Comandante del Departamento de Bomberos del Estado de Zacatecas

Los riesgos provocados por cualquier fenómeno perturbador ya sea de origen natural o por el hombre se pueden evitar si cada uno de nosotros adoptamos medidas y actitudes preventivas. En las emergencias sobreviven los más preparados, no los más fuertes, por ello, debemos seguir recomendaciones y pláticas con tus familiares o seres queridos y elaborar un Plan Familiar de Protección Civil.

Organí­zate con tu familia para que todos y cada uno deban realizar acciones de prevención, identificando qué hacer antes, durante y después de presentarse una situación de emergencia, contingencia o desastre y actúen de manera organizada y coordinada, contemplando la participación de los niños, personas con discapacidad y adultos mayores.

La falta de planeación adecuada para enfrentar desastres, expone vidas y patrimonio a mayor riesgo, la elaboración del plan es muy sencillo y útil, para realizarlo convenientemente hazlo con anticipación y practí­calo al menos tres veces por año.

Elabore cuatro pasos; Primero, detecta y reduce riesgos, revisa el estado de construcción de tu vivienda, el mantenimiento de las instalaciones de gas, agua, energí­a eléctrica, lo que represente peligro, atornilla o sujeta los muebles que pueden llegar a caerse, peligros que puedan presentarse en los alrededores de la casa, transformadores de energí­a, casas en laderas y rí­os.

Segundo; diseña rutas de evacuación elaborando un croquis sencillo de tu casa y alrededores sobre los posibles riesgos y recomendaciones para reducirlos, marca el lugar más seguro tanto dentro como fuera de tu casa, ubicando las rutas más seguras sin obstáculos en una evacuación, mide el tiempo que necesitas.

Tercero; toma la decisión más adecuada a fin de afrontar desastres, pregunta a qué peligro está expuesto, inundaciones, deslizamiento de laderas, incendios, sismos, etc.

Cuarto; realiza simulacros periódicamente en el hogar para comprobar acciones de preparación, fomenta la cultura de la autoprotección, entre la familia y la sociedad.

Un simulacro es un ensayo o práctica sobre cómo se debe actuar en caso de una emergencia, contingencia o desastre, organí­zate con los vecinos de tu cuadra, barrio y edificio con el objeto de mantener comunicación permanente y ayuda mutua.

No olvides que para evacuar niños, adultos mayores y personas con capacidades diferentes, el tiempo implicado muchas veces es mayor, por lo tanto, considera la posible ayuda que puedan necesitar, utiliza el teléfono únicamente en caso de emergencia, ubica rutas de escape, salida de emergencia, lugares de menor riesgo, al salir recuerda No corra, No empuje, No grite.

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