La legisladora Judit Guerrero, convocó hoy a las legislaturas estatales que aún no se pronuncian a favor de la Reforma Educativa, a avalarla pues “esta es gran propuesta consensada de construir un renovado sistema educativo nacional, más funcional y eficiente, que sirva a los intereses superiores de la República.”

Destacó que se han dado los primeros pasos para avanzar en este tema, sin embargo, advirtió que la siguiente etapa será diseñar una ley reglamentaria para darle viabilidad y plena operatividad a la reforma.

La legisladora Guerrero destacó los compromisos planteados que afectarán positivamente los procesos formales de enseñanza –aprendizaje, entre los cuales, señaló:

1).-La implementación del servicio profesional docente, que evalúe rigurosamente el ingreso, permanencia y promoción de los maestros en servicio, que elimine la corrupción en la designación de plazas laborales, “lo que lamentablemente aún persiste.”

2).-Se concede por mandato constitucional capacidad autonómica a las escuelas, lo que implica libertad de decisión profesional, para responder a las expectativas del desarrollo de las comunidades.

3).-Se otorga carácter de obligatoriedad jurí­dica a la evaluación institucional, y con ello se fortalecen también los mecanismos de rendición de cuentas públicas y de transparencia en la educación pública mexicana, para superar la opacidad.

4).-Se establece el compromiso de avanzar gradualmente en la creación de escuelas de jornada de tiempo completo y

5).-Se confiere autonomí­a técnica y jurí­dica al Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación.

Insistió en que la reforma educativa tiene dos objetivos primordiales: el primero, la recuperación de la acción rectora del Estado sobre la educación y el segundo, regresar a la relación productiva, sana y positiva entre magisterio y sociedad.

Explicó que la profesionalización de la tarea docente implica “la otra gran tarea de propiciar la transformación de las escuelas normales del paí­s y generar la construcción de un nuevo sistema de formación inicial de profesiones, de actualización y de capacitación continua.”

Ello implicará afirmó, el establecimiento de“un sano mecanismo de incentivos, que permita abolir los escalafones perversos de promoción que sólo benefician a unos y perjudican a la mayorí­a, sin importar si estos, es decir los profesores, trabajan con entrega, eficiencia y calidad.”