La Cruzada Nacional Contra el Hambre es una estrategia de inclusión y bienestar social con un enfoque integral y multidimensional, que lleva alimentación y proyectos productivos a las comunidades más pobres, pero también otorga becas educativas, mejora la calidad de la vivienda e introduce servicios de agua potable y energía eléctrica en comunidades rurales y colonias urbanas.

Además de hacer efectivo el derecho a la alimentación a través de Oportunidades, Diconsa, Liconsa y la tarjeta del Esquema de Apoyo Alimentario SINHambre en los 400 municipios considerados en la primera etapa de la Cruzada, se ha llegado con 117 mil 695 acciones de mejoramiento de vivienda,  45 mil 232 pisos firmes, 65 mil 514 techos seguros y 6 mil 949 muros firmes.

Como parte de este esfuerzo incluyente y de bienestar social, que involucra a los diferentes órdenes de gobierno, se han instalado redes de agua potable en 279 mil 927 hogares; drenaje en 168 mil 571 y letrinas o baños ecológicos en 4 mil 150 viviendas.

Ejemplo del compromiso cumplido es la señora Francisca Castillo, de Santiago Texcalcingo, en el estado de Oaxaca, a quien recientemente se le dotó de agua potable.

“Metieron el agua en toda la comunidad. Nos hicieron nuestras tomas, con llave y todo. Ya tenemos el agua potable, que es lo principal, porque sin ella uno no vive. El agua es más importante que otra cosa. Si no hay luz, pues a lo mejor no importa tanto, me alumbro con una vela; pero el agua no, el agua es muy necesaria, y más donde hay niños. Por eso, agradecemos al gobierno federal que nos haya traído estos apoyos”, dice.

La instrucción de la secretaria de Desarrollo Social, Rosario Robles Berlanga, es que se lleven alimentos a quienes lo necesiten, pero también servicios de vivienda, de drenaje, alcantarillado y electricidad, por lo que en el marco de la Cruzado se ha dotado de energía eléctrica a casi 56 mil hogares, uno de ellos el de Eutiminio Reyes de la Cruz, del municipio de San Andrés Cohamiata, municipio de Mezquitic, en Jalisco.

“Siete años duré sin luz. Ahora ya tengo y eso es bueno para mí y la comunidad. Antes comprábamos velas y sabíamos que se iban a acabar rápido, por lo que nos alumbrábamos hasta donde alcanzaba, pero con la Cruzada llegaron los de la Comisión Federal de Electricidad, pasaron casa por casa, y ahora estamos bien contentos con la luz. La Cruzada sí está dando resultados; se ven las obras y eso nadie lo puede negar”.

Asimismo, para mejorar la calidad educativa y evitar la deserción escolar en zonas de alta marginación, con la Cruzada Nacional Contra el Hambre se han otorgado 453 mil 856 becas de primaria y 76 mil 722 de secundaria, en los 400 municipios prioritarios.