Fotos: Misael Camarillo / MIRADOR
Zacatecas, Zac.-Mauricio Maldonado Parga, miembro de la Coordinadora Estatal de la Lucha del Pueblo en Zacatecas, conformada por diversos grupos de amas de casa, obreros, campesinos y estudiantes, maestros y ex braceros, además del Movimiento Ambientalista de Madero, denunció, en conferencia de prensa, el despido de un ex trabajador de la Minera Madero, ocurrido el jueves pasado.
“El hecho se dio de una manera prepotente, con alevosía y ventaja”, advirtió, y se encuentra como afectado Rogelio Flores, quien se ha destacado por su participación en la lucha que se libra en contra de la empresa extractora por la tremenda contaminación que lleva a cabo”, señaló.
Por su parte, Rogelio Flores Frausto, ex trabajador de la mina Madero, perteneciente al corporativo Peñoles, ratificó en denuncia pública el haber sufrido un despido injustificado el pasado jueves. El cese de sus labores, dijo, se atribuye a las denuncias que ha realizado públicamente sobre la serie de irregularidades que ha cometido la compañía en contra del medio ambiente y de los trabajadores ahí empleados.
Las denuncias versan sobre los malos manejos que se hace por parte de la compañía minera con los desechos de mineral, incluido el derrame de la presa en los jales, lo que ha ocasionado que se contaminen el subsuelo y lo mantos acuíferos de la zona.
Informó que a pesar de que desde hace 5 años laboraba en la empresa sin que hubiera problema alguno, la semana pasada fue rescindida su plaza sin justificación presentada por la parte patronal.
“Suponemos, añadió que a partir del movimiento que se ha generado en los medios de comunicación, comenzaron realizando este despido. Lo que no les conviene es que la comunidad cada vez esté más unida”, advirtió.
Puntualizó en el hecho de que se trata de una forma de amedrentar a los trabajadores el retirarlo de su puesto de trabajo sin que se haya cometido una falta.
“Por lógica, lo que vemos es que es con el fin de quitarlo de ahí y buscar que la gente vea lo que puede hacer la empresa con nosotros”, añadió un ciudadano de nombre Anacleto Almaraz, oriundo de la comunidad Francisco I. Madero, perteneciente a la capital del estado. Están tratando de confrontar a la gente que trabaja ahí con el movimiento ambientalista, hecho del que se hace responsable al gobierno, pues se ha visto en otras partes que las compañías llegan, se plantan, la gente protesta y les dejan ahí el “puro cascarón”.
Las familias quedan peleadas entre sí y la única que lleva beneficios es la empresa, de manera que es necesario aclarar que no queremos quitarles los trabajos a los mineros, argumento que utilizan los empresarios para manipular. “La paciencia del pueblo tiene un límite, y la paciencia se está terminando”, sentenció Almaraz.
Con “contratos leoninos” engañaron a la gente para que les cediera la tierra y ahora la empresa no quiere cumplir, añadió. Estamos en contacto con varios movimientos ambientalistas a nivel nacional y vamos a pedir su apoyo. La gente no se va a mover, aseguró.
Ante los hechos, los inconformes señalaron que las autoridades deberá tomar nota para intervenir en el conflicto, ya que de no ser reinstalado en su puesto de trabajo, Rogelio Flores tomaría “otras medidas” para presionar, incluida la posibilidad de realizar un plantón en las instalaciones de la minera.
Finalmente, Maldonado Parga dio a conocer que el asunto de los ex braceros no ha tenido solución, acusando que el gobernador Miguel Alonso y su equipo de colaboradores mienten al decir que están ayudando a los ex trabajadores migrantes, pero anunció que seguirán en la lucha.
