Por: Angulo Silva / MIRADOR

Zacatecas, Zac.-Por si faltaba una nota en el ya de por sí atropellado proceso electoral 2015-2016, y por si queremos abonarle al desprestigio y falta de credibilidad de que gozan los políticos y los partidos en México, ahora resulta que mejor sí. Pedro de León apoyará la candidatura de Alejandro Tello.

Estudios que en nuestro país han medido el nivel de confianza de diversas instituciones ante la sociedad dejan ver que los agentes de tránsito, las policías estatales, los jueces, los partidos políticos (políticos) y los ministerios públicos son quienes están en el rango más bajo.

¿Cuál es el factor común? La corrupción.

Fenómeno común es, además, el que a diario se ve en el “intercambio” de militantes y dirigentes de un partido a otro. Que si don fulano se fue a otro partido juntamente con sus huestes, a las que señala como numerosas, o que si mejor se regresa.

Hasta se dio el caso de una mujer que fue a gritonear a dos nuevos integrantes de Morena, en pleno anuncio de su adhesión, en un bochornoso espectáculo que deja ver la degeneración en que se ha caído y la serie de intereses que se mueven en el fondo.

Ya es que la búsqueda de espacios de poder puede ser añadida a las múltiples adicciones que se manejan hoy en día, y el “chapulineo” otro mal que viene a enrarecer aún más el aire infumable de la política sucia.

Tanto el PRI como el PRD habían dado cobijo a De León, de aquí para allá y de allá para acá. “Nos robaron la gubernatura, pero no los sueños ni las esperanzas ni las ilusiones de lograr un futuro mejor para Zacatecas», aseveró Pedro de León en un comunicado de prensa enviado el domingo por la noche. En el mismo, expresa el político que tomó la determinación «consciente de la responsabilidad que significa nuestra decisión que inclinará la balanza a favor de quien apoyemos».

Luego de algunas semanas de silencio, vuelve a tomarse la foto De León, ya que “seguirá trabajando con su estructura en los próximos meses”. La herida sigue abierta, y nunca cerrará. Veamos qué más viene para el político o a qué mares lo llevará su embarcación llamada “Podemos lograr más”. Recalca que sigue su ruta sin partido, pero el que a buen árbol