El 8 de septiembre, un “doble cumpleaños” que celebra la ciudad de Zacatecas: Manuel González 


Staff / MIRADOR

Zacatecas, Zac.-Manuel González Ramírez, cronista del estado de Zacatecas, señaló en entrevista que es posible que mucha gente no sepa porqué la máxima fiesta de la capital se lleva a cabo en el mes de septiembre. “Mucha gente va a la feria, pero no sabe cuáles son los orígenes de la fiesta ni qué es lo que realmente se conmemora”.
Es importante estar siempre recordándole a todo mundo, advirtió, a los que ya lo saben para que no lo olviden, y a los que no lo saben para que lo conozcan, los orígenes de una ciudad que ya por dos ocasiones su nombre aparece en la lista del Patrimonio Cultural de la Humanidad. En 1993, fue considerada en la categoría del Centro Histórico, y en 2010, como parte del Camino Real Tierra Adentro, en la categoría de Itinerarios culturales.

“No cualquier ciudad aparece dos veces en la lista del Patrimonio Cultural de la Humanidad, y aunque no es una obligación, sería motivo de orgullo que los habitantes de la misma, por este estado, conociéramos como fue que Zacatecas conquistó esa grandeza, que son de los máximos reconocimientos que se pueden obtener en la actualidad en el ámbito internacional”.

Todo comenzó un 8 de septiembre de 1546, cuando tuvo lugar el arribo, hasta este sitio, a los pies del cerro que luego fue bautizado como Cerro de la Bufa, una expedición encabezada por Juan de Tolosa, de origen Vasco, que precisamente andaba haciendo una expedición para localizar yacimientos de metales preciosos, en particular, plata.

Eso es lo que se celebra y conmemora, aunque ha sido motivo de debate el cómo debe llamarse a lo que estamos festejando. Hay quienes dicen que es el aniversario de la fundación de la ciudad, lo cual no es muy correcto. Hasta el momento no se han encontrado pruebas, “y dudo que existan”, de alguna ceremonia de fundación que haya generado un documento que podamos conocer como el acta de fundación, aseveró el cronista.

Los que andaban buscando yacimientos de metales preciosos, dijo, en lo último que andaban pensando era en fundar un asentamiento donde llegaban, ya que su permanencia dependía de la riqueza de oro, plata o algún otro metal que encontraran. En muchos lugares, se acabó la riqueza y se acabó el pueblo; hoy son pueblos fantasmas”. Sin ir más lejos, en el norte del estado tenemos Aranzazú, asentamiento que se encuentra en medio de la montaña que está justo entre Concepción del Oro y Mazapil. Es un pueblo fantasma.

Real de Catorce, si vamos a otro estado como San Luis Potosí, es otro pueblo fantasma, y hoy eso es parte de su atractivo.

En Zacatecas, prosiguió Manuel González, surgió primero un campamento de mineros que se convirtió luego en un asentamiento minero, y desde entonces a la fecha ha tenido continuidad, nunca ha quedado despoblado. Esto, precisamente porque la riqueza es inmensa en plata y oro en lo que hoy es el municipio y gran parte del estado.

Esta riqueza no se ha agotado desde el descubrimiento de las primeras vetas, que fue en 1548, allá por donde hoy es Vetagrande y Pánuco. Primero fueron los españoles los que explotaron estos yacimientos; posteriormente han sido de otras nacionalidades, como hasta hoy día, que son quienes se llevan esa riqueza inagotable hasta el día de hoy.

Por otro lado, expuso, hay quienes dicen que el 8 de septiembre de conmemora la conquista de Zacatecas, y es muy respetable esa forma de llamarle a lo que pasó aquí en esa fecha. Sin embargo, si nos basamos en lo que dice el Primer Libro de Actas de Cabildo de Zacatecas, hay una reunión que se consignó de los diputados de minas y una autoridad eclesiástica, en mayo de 1559, con la finalidad de instituir la fecha del 8 de septiembre.

Son interesantes esa reunión y el acta porque ahí acuerdan no sólo la institución de la fiesta, sino que dicen por qué y para qué. Hacen alusión a que es una forma de recordar que un 8 de septiembre (de 1546), se descubrieron las minas que dieron origen a ese asentamiento.

Además, fue en una fecha muy singular, porque el 8 de septiembre, según el calendario litúrgico, se lleva a cabo la solemnidad de la fiesta de la Natividad de la Virgen María. Por esa razón, ha tenido una doble importancia, ya que “se festejan dos cumpleaños”. Esto, tomando en cuenta que lo que pasó ese día marca el origen de la capital del estado.

De ello estaban conscientes los primeros mineros y fundadores, de tal suerte que así lo consignan en ese documento, del cual, por fortuna, se conserva el original, en el Archivo Histórico del estado.

Por esa razón, adoptan a la Reina del Cielo, bajo la advocación de Nuestra Señora de los Remedios, como la patrona y protectora de este lugar. A la vez, le dan el nombre oficial a este lugar, Las Minas de Nuestra Señora de los Remedios de los Zacatecas, que fue la imagen que los primeros pobladores tenían aquí y a la cual le profesaron una devoción especial. Es por eso que se le declara Patrona de este asentamiento.

Ella será la patrona oficial hasta 1585, cuando el rey Felipe Segundo le otorga a las Minas de Zacatecas el título, categoría, dignidad y nombre de Ciudad de Nuestra Señora de los Zacatecas. En esa real provisión que firma, dice: “y le damos por patrona a esta nueva ciudad a Nuestra Señora de los Zacatecas”. Con ello, creó una nueva advocación mariana, segunda patrona en el tiempo para la ciudad y que aparece en el Escudo de Armas que también se le otorgó a la ciudad.

El hecho de que aparezca la virgen y cuatro de los primeros pobladores o personas que tuvieron que ver con el poblamiento inicial de la hoy ciudad de Zacatecas, es una alusión iconográfica a aquél 8 de septiembre.

El documento más antiguo que hemos encontrado en los archivos de España, dio a conocer González Ramírez, y que menciona la palabra “Zacatecas”, refiriéndose a nuestra ciudad, es de diciembre de 1548, donde oficiales de la Real Hacienda, de la Real Caja de Guadalajara, capital del reino de Nueva Galicia, a cuya jurisdicción perteneció por un buen tiempo de la ciudad de Zacatecas, le notifican al rey Carlos Primero de España que acababan de descubrirse ricas minas de plata.

El documento hoy día se conserva en el Archivo de Indias de Sevilla, España, donde estuvo el Consejo de Indias, que era el que atendía todo tipo de asunto relacionado con la Indias Occidentales, como se les conocía a los dominios españoles antes de que fuera América.

También en esos primeros acuerdos documentados se habla de cómo celebraban el día 8, que era con una misa solemne en la víspera y el mero día. “Eran dos días de fiesta; hoy son más”. También había una procesión que salía a la plaza principal, la cual se ubicaba en el espacio donde hoy está el Mercado González Ortega.

Hoy en día se realiza algo similar, aunque es más bien una Romería porque incluye carros alegóricos y es menos solemne que una procesión. Hoy, la noche del 8 de septiembre, la imagen de la virgen sale a recorrer las calles de la ciudad.

Otro dato significativo, se acuerdo con el cronista del estado, es que ya se hablaba en ese entonces de una fiesta con toros. No era una corrida como la que hoy conocemos, sino que literalmente era una corrida de toros porque corrían los animales por la vía pública y desembocaban en lo que era la plaza mayor, donde había un corral improvisado con madera, donde se divertían con los toros.

Por lo regular eran tres de lidia, pues era incosteable traerlos desde otras tierras lejanas sólo para divertirse con ellos un rato una vez al año. El problema lo resolvía, según algunos testimonios, trayendo esos “animales cornudos y jorobados” de por acá del norte de la Nueva España.

Estamos hablando, consigna el narrador, de una especia de búfalos o bisontes, que era con los que se divertían y hacían la fiesta de toros.

Estas eran, pues las manifestaciones festivas que tanto en el ámbito religioso como en el mundano se realizaban en torno al 8 de septiembre, aunque “no podemos decir que en aquél entonces había feria, sino que era una fiesta religiosa y una fiesta popular de muy corta duración”.

Curiosamente, en el siglo 19, mejor otras poblaciones, no la capital del estado, tuvieron su feria, como por ejemplo Jerez. Poco tiempo después de haberse consumado la independencia solicitó permiso para tener una feria anual, a pesar de que en Zacatecas no hay antecedente de una feria propiamente dicha, sobre todo de larga duración, y sería hasta 1938 se instituye una feria en la capital del estado.

En un principio era la Feria Nacional de Año Nuevo, y fue a raíz de una iniciativa que surgió de Gobierno Federal “de organizar ferias a diestra y siniestra por las poblaciones del interior del país”, precisamente con el fin de reactivar la economía.

Etiquetas

Noticias relacionadas

*

*

Top