Reportaje Especial
- Es la primera vez que un proceso de paz se incluye el enfoque de género
Por: Mercedes Alonso
SemMéxico/SEMlac.- Cancilleres y representantes de la Unión Europea (UE) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) valoraron el papel de las mujeres en la solución de conflictos y subrayaron la importancia de la resolución 1325 de Naciones Unidas sobre la mujer, la paz y la seguridad.
Lo anterior tuvo lugar en actividad paralela a la Cuadragésima Octava Reunión de Cancilleres y Altos Funcionarios de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños y la Unión Europea, que hasta el 26 de octubre se desarrolló en la capital de la República Dominicana, con el objetivo de revisar el cumplimiento de las tareas acordadas en la Segunda Cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno, celebrada en Bruselas, Bélgica, en 2015.
La canciller de Colombia, María Ángela Holguin, refirió el papel de las mujeres en la solución del conflicto en su país y afirmó que “es la primera vez” que un proceso de paz en el mundo incluye el enfoque de género, en la medida en que durante las negociaciones “las mujeres estuvieron representadas directamente”, dijo y enfatizó a seguidas su confianza en que “el rol de las mujeres en la paz sea realmente un modelo”.
Aunque el ministro de Relaciones Exteriores dominicano, Miguel Vargas Maldonado, estuvo ausente en este intercambio por encontrarse en otra de las actividades colaterales del evento, expresó en un comunicado que “la implementación integral de la resolución 1325 permitirá formular una agenda de políticas globales en pro de las mujeres en niveles políticos y operaciones para la paz y la seguridad internacional”.
La resolución 1325 convirtió la promoción de la igualdad de género y el empoderamiento de las mujeres en una preocupación internacional de paz y seguridad, tal y como se plantea en el texto de Onu Mujeres, titulado “Las mujeres, la paz y la seguridad: directrices para la implementación nacional”, publicado en Internet.
En ese texto se expone que fue la primera vez que el Consejo de Seguridad reconoció que “el conflicto armado afecta a las mujeres y las niñas de manera diferente que a los hombres y los niños, por lo que se necesitan cambios en la manera en que la comunidad internacional enfoca la prevención del conflicto, la resolución del conflicto, el mantenimiento de la paz, y la consolidación de la paz”.
Vargas Maldonado insistió en que aún deben concretarse acciones “verdaderamente efectivas que permitan a las mujeres convertirse en actores principales en la implementación misma de la resolución (…) bajo la necesidad de incorporar una perspectiva de género en las operaciones de mantenimiento de paz”.
El presidente Danilo Medina encabezó el inicio oficial de la reunión de ministros de Relaciones Exteriores, acto en el cual el canciller Vargas pronunció el discurso central, seguido por Federica Mogherini, representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Políticas de Seguridad.
Medina se manifestó ante los presentes en esta cita, en la cual participan cancilleres y jefes de delegaciones de los 33 países de la Celac, cuya presidencia “pro tempore” ejerce este año República Dominicana, y de los 28 de la UE, “por el establecimiento de reglas claras y justas en los mercados internacionales que nos permitan redescubrir el potencial del comercio como generador de riquezas y empleos, además de competir en igualdad de condiciones”.
El Jefe del Estado dominicano pidió mayor integración y solidaridad hacia un mundo sin pobreza y el desarrollo equitativo de todos los países y saludó que naciones del “antiguo y nuevo mundo” se encuentren en Santo Domingo, ciudad inicial de acontecimientos que revolucionaron el mundo:
“Espero que este diálogo al que damos apertura sea fructífero; que renueve los poderosos lazos históricos y culturales que nos unen”, concluyó Medina.
Pobreza, desigualdad y drogas
Los representantes de 61 naciones de ambos continentes debatieron hasta este miércoles 26, en el salón de convenciones de la cancillería dominicana, acerca de cómo reforzar el diálogo político entre ambas regiones, considerado este uno de los tres pilares de esa asociación, sin descuidar las relaciones económicas y la cooperación.
Aunque la UE y la Celac han puesto la mirada en temas tan esenciales como la pobreza, la desigualdad y las drogas, se destacó en el desarrollo de las sesiones de trabajo el interés por conocer acerca de la implementación de los asuntos centrales de la agenda 1325, en particular el rol de las mujeres en los procesos de paz, para presentar ideas sobre cómo efectuar una futura cooperación birregional en dicha materia.
