Fotos: Misael Camarillo / MIRADOR
Guadalupe, Zac.- La falta de visión, previsión, planeación o presupuesto pueden ser los factores que acaben con las buenas intenciones. Lejos de ser un centro social para la comunidad o un punto turístico por el bello escenario que ofrece desde la parte superior, el mirador del Cerro San Simón se encuentra convertido en un foco de infección, un sitio destruido y de reunión para vándalos; un elefante blanco.
Vecinos del lugar señalan que las autoridades del ayuntamiento descuidaron completamente las instalaciones, donde anteriormente se daban clases de manualidades, aerobics y hasta había un grupo de psicólogos que ofrecían consulta a la gente. Hoy, el sitio luce olvidado de toda acción favorable y se ha convertido en sitio de reunión para personas que lo han deteriorado.
Así, en varias ocasiones se han organizado los colonos para acudir a la presidencia municipal y exigir que se retomen las actividades, o cuando menos, que hiciera acto de presencia la policía para que resguardara las instalaciones.
Cuando dejaron de prestarse los servicios, la Policía Estatal Preventiva (PEP) acudía con regularidad. Posteriormente fue la Preventiva, pero ahora ya nadie se ocupa de salvaguardar el inmueble.
Como respuesta, a los vecinos se les informó que no había dinero debido a que fueron retirados los apoyos que se ofrecían para programas de implementación a jóvenes, por lo que de momento no se volvería a brindar el servicio.
Además, autoridades de la Secretaría de Turismo señalaron en varias ocasiones que el Cerro San Simón sería objeto de una importante inversión para que se convirtiera en uno más de los destinos turísticos de Guadalupe y de la entidad. La idea era ofrecer recorridos a caballo por los alrededores y que se pudieran establecer rutas para el uso de cuatrimotos y vehículos todoterreno, fomentando el turismo de aventura y complementar la opción cultural que ya de por sí tiene Guadalupe. El proyecto quedó en el tintero.
El Cerro San Simón se ubica entre las colonias Tierra y Libertad (tercera sección) y Ampliación Las Minas. Por su elevación, 2 mil 402 metros sobre el nivel del mar, ofrece una espectacular vista del valle de Guadalupe y se constituye, aún en un santuario de la flora silvestre de la región. Por las cercanías se pueden observar también algunas especies animales típicas de la zona.
Sin embargo, y pese a las reiteradas promesas de políticos en campaña, ninguno de los proyectos ha quedado con vida. El más reciente personaje, Enrique Flores Mendoza, durante sus actividades proselitistas como aspirante a la alcaldía de Guadalupe por la alianza PRI-Panal-Verde, ofreció que el sitio sería retomado para fomentar el turismo.
Sostuvo que con la construcción de una vialidad periférica se daría mayor proyección a la zona, ya que las colonias que rodean al cerro han crecido de manera exponencial durante los últimos años. Al evento político asistió el coordinador de los diputados del Partido Revolucionario Institucional en la Cámara federal, César Camacho, quien, en el uso de la voz, sostuvo que desde San Lázaro impulsaría la iniciativa de reactivar esta opción turística, religiosa y cultural, como eran las intenciones del aspirante a presidente municipal.
Ofreció, igualmente, que se tendría el respaldo de Alejandro Tello, quien, una vez en la gubernatura de Zacatecas, se daría a la tarea de dar pasos concretos para la consolidación del proyecto. Tello no les va a fallar, dijo a los moradores del sitio, estando presente también el aspirante a gobernador.
De acuerdo con información dada a conocer por el diario Imagen de Zacatecas, se inició con la construcción durante la gestión del presidente municipal Felipe Álvarez Calderón (2001-2004) y se invirtieron 800 mil pesos para efectuar la cimentación.
Posteriormente fueron construidos 20 talleres artesanales, mismos que nunca fueron utilizados con este objetivo. La inversión fue de aproximadamente 2.8 millones de pesos y ya en 2007 el lugar comenzó a sufrir los efectos de grupos de vándalos, pues las paredes fueron grafiteadas en su mayoría. No había puertas ni protecciones en las ventanas.
Para el año 2009, Rafael Flores Mendoza, entonces secretario de Turismo, dio a conocer a la ciudadanía que sería reactivado el mirador, creándose para ello un centro artesanal y turístico, que sería referente en todo el estado.
Ya como alcalde, en 2011, Rafael Flores anunció que sería construida una imagen de la Virgen de Guadalupe, la cual tendría 40 metros de altura y que sustituiría la que estaba erigida entonces, la cual apenas medía 7 metros.
Tampoco funcionó la propuesta para que llegaran más visitantes, como también quedó en intento la propuesta que hiciera el cabildo en 2013 con su idea de una estatua monumental en la cima para que la gente comenzara a visitar el cerro.
En su oportunidad, Roberto Luévano indicó que serían gestionados recursos por 2 millones de pesos para la creación de talleres artesanales, los cuales estarían vinculados con el Instituto Nacional del Emprendedor. El trámite se haría ante el Consejo Nacional de Cultura (Conaculta).
Sin embargo, para ese entonces ya las instalaciones habían sufrido un deterioro notable, ya que grupos vandálicos se llevaron todos los accesorios de los sanitarios, las puertas, tinacos para almacenamiento de agua y lo que pudieron, convirtiéndose en foco rojo como tiradero de basura y centro de reunión de malvivientes.
Durante la pasada administración, autoridades de la Semarnat y Profepa anunciaron que el Cerro San Simón sería reforestado, para lo cual dieron a conocer que tomarían parte de las acciones la sociedad civil y diversas organizaciones dedicadas a la preservación de la fauna y flora silvestres. Se trata de darle vida al Cerro San Simón, apuntaron, para que se convierta en un centro turístico natural, afirmaron.
En la primera etapa serían plantados mil 500 árboles, con una altura mayor a 1.50 metros, pero con posterioridad vendrían otras etapas de reforestación, según un programa de trabajo que fue dado a conocer, bajo la preocupación de crear espacios verdes en el municipio.
Otro fenómeno digno de destacarse es el hecho de que diversos predios que se ubican en la zona comenzaron a ser invadidos por familias que construyeron endebles casas. Se posesionaron de un lote de 809 metros cuadrados localizado en la colonia Ampliación Las Minas. El intento de adueñarse del espacio no fructificó, ya que el ayuntamiento de Guadalupe se abocó al desalojo.
Este terreno se encuentra considerado en el área de donación de la colonia y no puede ser destinado a la vivienda.
De acuerdo con información publicada en el periódico 7 Días, el portavoz del grupo de familias desalojadas, Enrique Trejo, informó que en 1991 el espacio, parte de un lote de 154 hectáreas, fue asignado a las organizaciones denominadas Frente Popular de Lucha de Zacatecas (FPLZ), Unión de Colonos Solicitantes de Vivienda y Trabajadores del Campo y la Ciudad Tierra y Libertad de Guadalupe, encabezadas respectivamente por José Narro Céspedes, Román Rodríguez Contreras y Samuel Herrera Chávez.
El convenio firmado, prosigue el periódico, por el entonces Instituto Zacatecano de la Vivienda Social y las organizaciones antes señaladas contemplaban que la superficie de 154 hectáreas, que abarca actualmente a 20 colonias, entre ellas Ampliación Minas, sería repartida entre los tres grupos sociales, por lo que se ostentaban como legítimos dueños, ya que portaban, incluso, sus cartas de asignación.
La versión oficial de las autoridades del ayuntamiento es que resulta imposible la construcción debido a que se trata del área de donación de la colonia, además de que no acreditaron plenamente la asignación de lotes.
Así las cosas, el ahora alcalde, Enrique Flores, tiene la responsabilidad de rehabilitar el espacio, siendo este uno de sus compromisos de campaña, además de que le quitaría el peso de encima a su hermano Rafael, quien jamás dio continuidad al tan llevado y traído proyecto, cuando fue secretario de Turismo. También está de por medio el ofrecimiento del actual diputado local priísta Osvaldo Ávila Tiscareño, quien tiene, dijo, todas las intenciones de hacer del Cerro San Simón un atractivo importante. Ya veremos.
