Zacatecas, Zac.- Alejandro Rivera Nieto, secretario general del Sindicato Independiente de Trabajadores del Estado de Zacatecas (SITEZ), informó que este jueves se vivió una jornada de alarma entre los trabajadores de Yusa Autoparts, debido a que se dio la situación de que se estaba despidiendo a trabajadores de forma injustificada. Se acudió a apoyarlos, dijo, y se encontraron con la presencia de elementos de corporaciones policiacas.

La manifestación pacífica que se llevaba a cabo, es para que “entienda la empresa que no pueden estar jugando con la gente”, y en ese sentido se manifestaban pacíficamente. “La empresa está cortando las cabezas de la gente que les incomoda y que conforman el sindicato independiente”.

Es urgente que se solucionen los problemas de los empleados en el aspecto de seguridad e higiene, ya que trabajan bajo una nube de polvo y solventes, donde los compañeros ya padecen de su salud en varios aspectos, derivado el hecho de las jornadas laborales de más de 12 horas. Además, siguen padeciendo situaciones de acoso laboral.

Los elementos de seguridad, agregó, llegaron a las instalaciones e ingresaron a las mismas, según parece para entrevistarse con los administrativos de la compañía. “Llegaron los elementos policiacos como si fuéramos unos delincuentes, cuando estamos en una manifestación pacífica. Nos dijeron que nos hiciéramos a un lado y nosotros hicimos caso para que no hubiera problema”.

La gente necesita un trabajo, pero bajo ciertas condiciones, y el SITEZ se encuentra en el sitio para apoyar, aseveró, mientras que a mucha gente la amenazaron con el despido.

La gente ya alzó la voz y comenzó a afiliarse, pues se tienen registrados más de 500 empleados, afirmó el dirigente, y este jueves 50 personas más se adhirieron.

Por otro lado, señaló que si bien el gobernador comentó que en las familias hace falta que se inculquen los valores, en este caso no se tiene la oportunidad de hacerlo, ya que los padres y las madres están trabajando por muchas horas en Yusa.

Así, hizo un llamado a las autoridades de gobierno para que apoyen en la solución de este problema. Los trabajadores duran en las empresas seis meses o hasta un año, porque son condiciones laborales deprimentes.

Se sabe del despido de cinco personas más en Yusa, pero ya se había despedido a 39 personas más, y se les dice al momento de la terminación de la relación laboral que “ya la empresa no requiere de sus servicios”, según manifestó uno de los empleados que se quedó sin trabajo. El contrato que se tenía era por tiempo indefinido, y no se les entregó copia de documento alguno.

Varios de los despedidos ya tenían hasta cinco años laborando en esa compañía, y no se les especificó los conceptos de su finiquito.

En el uso de la voz, el secretario general del recién creado Sindicato Independiente de los trabajadores de Yusa, Irineo Rodríguez Raudales señaló que los despidos vienen a raíz de la conformación del sindicato, y la empresa tiene miedo de cambiar al sindicato. “Están alarmados, ya que tenemos ya 560 miembros”. Los trámites legales se iniciaron, y se llegó a un acuerdo con gobierno la semana pasada y con representantes de la empresa. Se llegó al acuerdo de que se terminaría el acoso laboral y los despidos, pero no fue así.

Al contrario, advirtió, se teme por más despidos, ya que “la lista es larga”. Al despedirse no les dan causa, “los sacan luego de todo lo que les hiciste ganar, porque esta es una empresa multimillonaria, te sacan como animales, a las 8 o 9 de la noche de las comunidades y sólo les dicen que se trasladen como puedan, aunque no traigan dinero.

El dirigente hizo un llamado al gobernador para que ayude a solucionar esta situación. “Queremos trabajos dignos donde existan condiciones, y no empresas como esta”, aseveró. Además, “nos topamos con la sorpresa de que se tienen aquí patrullas de la Estatal, la Metropol y la Federal; pareciéramos los más grandes sicarios, cuando nos damos cuenta de que el punto crítico del estado es la inseguridad; las calles están vacías y no hay ninguna patrulla y a nosotros nos mandan las patrullas como si fuéramos los más grandes delincuentes”, sentenció.