Por: Dra. Norma Julieta del Río Venegas

Zacatecas, Zac.-El trabajo en la Administración Pública  muchas veces da resultados exitosos, siempre y cuando se trabaje en equipo, no en grupo, un grupo se entiende que son varias personas que por alguna decisión, gusto o afinidad de estudio o simplemente porque te sortearon perteneces a un grupo, como cuando estas en la escuela, por azar o abecedario o edad te canalizan al grupo  A B C D etc, en turno vespertino a matutino, pero ahí te colocan, y perteneces a ese grupo, y si, un grupo es más fácil de formar que un equipo.

En un equipo, son varias personas trabajando para un mismo objetivo, todos con una función específica para llegar al fin trazado. Integrar un equipo requiere que todos se echen la mano unos a otros para el objetivo final.

Mi querido amigo Arturo Brizio Carter, en sus conferencias magistrales que expone  en las Dependencias, Instituciones y en la Iniciativa Privada, ejemplifica el trabajo con deportistas y con equipo de futbol,  son conferencias que te llevan a la reflexión de lo que verdaderamente son los equipos de trabajo, y si,  en el  futbol un equipo se conoce, cada individuo tiene una tarea fundamental para lograr el triunfo, en la Administración Pública  igual, si alguien se desconecta o no realiza las funciones que le fueron encomendadas a través de un mandato de  Ley,  Manual o memorándum, afecta el fin común. En el equipo de futbol si un medio o delantero no realiza su función, afecta a los demás y jamás llegara la victoria.

La Administración desde sus orígenes plantea esto, recordemos a Henry Fayol, considerado por muchos el padre de la administración, definió al equipo en su proceso administrativo que cualquier administrador conoce, o más bien, si es administrador, debe de conocerlo y aplicarlo en su trabajo y en su vida cotidiana, como es la  Planeación , Organización, Dirección  Coordinación, y Control, proceso administrativo que inconscientemente todos y cada uno independientemente de ser o no profesionista, aplicas en el día a día de tu vida.

Por ello en la práctica, en cualquier Gobierno, se deben de aplicar estos pasos y jugar como un verdadero equipo, aplicando las teorías de Fayol y de los estudiosos del tema, si se divide el trabajo las tareas tendrán mejores resultados y en menor tiempo.

Los titulares no solo deben de dar órdenes, recordemos que quien da órdenes tiene una responsabilidad asumida ante la sociedad y ante las leyes, pero sobre todo, hay que predicar con el ejemplo para tener calidad moral ante su equipo, es muy importante definir jerarquías y que se delimite quien es la autoridad y quien da las órdenes, porque suele suceder que hay más “autorizados” para dar órdenes y se pierde el mando y sobre todo, llegan los abusos de autoridad.

Siempre ha sido polémico el término de “burócrata” pero hay excelentes burócratas que realizan su trabajo y si esto es remunerado económicamente y justamente, será satisfactorio, pero más aún, si el Titular o jefe en mando suele dar las indicaciones con respeto y motivación y hacer sentir que va junto con los subordinados en lo que salga bien o mal, excelente.

La Administración Publica ha evolucionado, debemos de entender que son posiciones que van y vienen y que al paso de ellas debemos de trabajar en equipo y dar resultados, lamentablemente los protagonismos y los actos individualistas y más aún, la percepción de corrupción que México tiene como País, han ido opacando más y no coadyuvando en nada a realizar un verdadero ejercicio de rendición de cuentas y de acciones en beneficio de los demás.

El fondo está en que no se sabe trabajar en equipo, quizá se sabe,  pero no se quiere hacerlo,  se prefieren los grupos, donde hay siempre alguien que asume un liderazgo y da las ordenes, en el equipo, todos analizan y opinan, es un trabajo en conjunto.

Hace algunos meses tuve la oportunidad de conocer un libro denominado: “De la idea a la práctica” escrito por Salomón Chertorivsky , el cual fue comentado por José Antonio Meade, Secretario de Relaciones Exteriores del Gabinete Federal, un servidor público hablando de sus vivencias, es bueno, pues más allá de la teoría necesitamos conocer experiencias en la práctica, son buenos los múltiples cursos que se ofrecen de equipos a  organizaciones o para los Gobiernos, pero si acudes y no llegas aplicar lo aprendido, seguirá existiendo un único líder y los resultados y la satisfacción y aceptación de la ciudadanía, tardara o nunca llegara.