Fotos: Misael Camarillo / MIRADOR
Al grito de “Todos somos Ayotzinapa”, docenas de personas tomaron parte en una marcha mitin en la explanada del Congreso del estado, desde las 17 horas. Convocados por el Sindicato de Telefonistas de la República Mexicana (STRM), el movimiento se sumó a las diversas manifestaciones que se han dado a lo largo y ancho de la República, lo mismo que en otras partes del mundo.
A cuatro meses de los lamentables sucesos donde desaparecieron 43 estudiantes de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos en Iguala, en el estado de Guerrero, las consignas de los manifestantes ahora cobran un giro, luego de los escándalos que han protagonizado el Presidente de la República, su esposa y el secretario de Hacienda (Luis Videgaray), por sus vínculos y transacciones con Grupo Higa.
Participaron en el mitin poco más de 300 personas, además del STRM, miembros del Frente Social por la Soberanía Popular, el Sindicato del Monte de Piedad, los correspondientes al IMSS y la Conajupe, quienes gritaron la nueva consigna: ¡Que caiga Peña Nieto!, en apoyo al Frente Amplio Social Unitario (FASU) y alos padres de los estudiantes desaparecidos.
Jorge Arroyo Méndez, líder del sindicato de telefonistas, señaló que los miembros de la FASU cambiaron la fecha en que habrán de movilizarse para el 31 de enero, señalando en su intervención pública que ningún acontecimiento ha indignado tanto a la sociedad mexicana y ha colmado su paciencia como la desaparición forzada de los 43 estudiantes de Ayotzinapa.
Por su parte, Efraín Arteaga Domínguez, representante de la Coordinación Ejecutiva del Frente Social por la Soberanía Popular (FSSP) dijo en su turno en el uso de la voz, una vez que el contingente estuvo en la Plaza de Armas, que el asunto de los normalistas es un crimen de lesa humanidad, y que no puede verse como un simple homicidio ni una desaparición forzada. Al gobierno de México, dijo, “se le ha ido la situación económica y política de las manos”, dijo.
Finalmente, Pedro Huerta, miembro del Sindicato de Telefonistas, señaló la inconformidad que existe de parte de la ciudadanía para los dirigentes de la nación, y de manera severa respondió al “supérenlo” de Enrique Peña Nieto, “que lo supere su madre”. En Zacatecas hay también mucha corrupción, rechazando la idea de que la ciudadanía siga pagando impuestos con los que luego los políticos y la clase dirigente se compra mansiones.
