Zacatecas, Zac.- Uno siente que se reproduce la violencia; yo creo que siempre es una llamada de atención para no bajar la guardia, Yo pienso que esta gente tiene sus estrategias cuándo va a actuar. No es todos los días, se esperan a ciertos momentos en que pareciera que bajamos la intensidad de la lucha contra la violencia, aseguró en su mensaje dominical a los medios de comunicación el obispo de Zacatecas, Sigifredo Noriega Barceló.
Hizo un llamado para que “no nos acostumbramos a la violencia, y sigamos trabajando en la paz para que verdaderamente sea un estilo de vida; según los datos que dio el fiscal en su informe, en Fresnillo se recrudeció muchísimo la violencia intrafamiliar, y es ocasionado por el alcoholismo de los jóvenes y las drogas de distintos tipos; estas son las causas porque llegan a casa fuera de sí y ordinariamente papá o mamá no están en esa disposición de ser pacientes y es cuando empiezan las dificultades”.
Del mismo modo, invitó a la población para no bajar la guardia y seguir buscando formas de enfrentar la violencia: “yo creo que esto es a través de gestos pequeños, les decían al terminar la misa, Nuestro Señor llama a la conversión, pues hay que convertirnos y de esa manera contribuir a que la maldad disminuya.
Si tú eres una persona que estás convencido, que tienes que respetar a los demás, que tienes que apoyar sobre todo al más necesitado, estoy seguro que habrá menos espacios para la violencia”.
Sobre el hecho de que muchos jóvenes se siguen involucrando con el crimen organizado, dijo que recientemente estuvo en la zona de Pánfilo Natera, “un municipio muy grande con muchas comunidades y acabo de hablar con sacerdotes de aquel rumbo y me dan esa información, que los jóvenes están siendo captados fácilmente por los que trafican con la violencia.
Haría un llamado a los muchachos jóvenes, sobre todos en edad de preparatoria; se calcula que más del 30% son los que están en las cárceles, menores de 25 años, para que estemos atentos, no seamos ingenuos para trabajos fáciles, para dinero fácil, sino que abramos los ojos, se den cuenta de que son usados y lo peor que te puede pasar es que seas desechable. Te ocupo ahorita y al rato te dejé porque ya no me sirves. Es una nueva forma de trabajar de la gente que está ocasionando esta maldad”.
Hizo un sentido exhorto a los muchachos “a abrir los ojos y a prepararse; por ningún motivo dejen la escuela, pues creo que ahí van a recibir las mejores herramientas para llevar una vida digna y vivir en paz. No se requieren muchas cosas para ser felices. No se nos aceleren por el camino fácil del dinero”
Al ahondar en el tema de seguridad pública, expuso que está bien el bachillerato militarizado que se planea para la entidad, ya que se requiere en muchos sentidos: “disciplina, más que hacerse militar, la disciplina que requerimos en la vida y que muchos padres de familia están pidiendo para sus hijos”.
Por otra parte puede ser el camino para que haya mejores policías y mejores militares. “Creo que se está haciendo lo necesario para prevención y para la formación de quienes nos van a cuidar y de quienes van a ser directamente responsables de la paz pública; me parece como idea excelente, no conozco muy bien el mecanismo pero espero tener esta semana un poco más de información para saber cómo funciona”.
Si son esos fines, cuentan también con todo nuestro apoyo con la formación de valores.
En otro tema, en la Iglesia también se tienen dificultades económicas, como en todo el estado. Dijo no tener a la mano datos sobre lo que se recaba de limosna, pero que cada mes las 118 parroquias rinden un informe financiero.
“Lo que se recoge de ofrenda s reflejo de la situación económica qué está pasando la gente; que hay meses malos, hay meses buenos; se nota cuando hay quincena, se nota cuando hay cosechas y así tenemos detectado eso, que hay altibajos y que en general es a la baja la tendencia”. Agregó que en este rubro la Iglesia “vive al día”, aunque los meses buenos ayudan a los malos para poder completar la nómina, y al momento no se ha recibido queja de empleado alguno.
Sostuvo, por último, que la gente es muy consciente y cuando tiene colabora; “sufre cuando no tiene, pero en ese sentido yo invitaría a que nadie se sienta mal; es como la vida del Evangelio, que aunque sea una moneda, está dando todo lo que en ese momento tiene.
