Lic. Arturo Jairo (*)
El envío de remesas a México, registró en el primer trimestre del año una cifra récord de 4 mil 16 millones de dólares; es decir, 49 por ciento más que en febrero pasado.
Esta nota destacó por el envío de recursos de los connacionales en el extranjero a sus familias en México, durante la crisis ocasionada por la pandemia del Covid-19. Nuestros analistas estiman que desde hace 20 años no se tenía una cifra similar.
Además, representó un aumento de 35 por ciento respecto a marzo de 2019. De acuerdo con el Banco de México, el promedio de envío de remesas fue de 378 dólares. En nuestra colaboración anterior, coincidimos en cuanto a los objetivos del Plan Nacional de Desarrollo (PND) 2019-2024, en que los programas sociales sectoriales deben contar con una incidencia concreta en la mejoría de las condiciones de vida de las principales zonas expulsoras de mano de obra.
Por ello en la “Declaración de la Alianza del Pacifico”, firmada recientemente dentro de la XIV Cumbre en Lima Perú, los países integrantes incluyendo México se declararon abiertamente en contra de cualquier medida proteccionista en la economía internacional, dando prioridad al intercambio de experiencias entre países con la migración.
En Zacatecas en esta materia el año pasado, se posesionó como el segundo lugar a nivel nacional en el desplazamiento de sus connacionales hacia los Estados Unidos.
El motivo principal, según un diagnóstico de INEGI, es por falta de oportunidades y escasez de recursos económicos principalmente. Considerando que esta información fue proporcionada por la Encuesta Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), ya que el flujo migratorio se ha venido incrementado a una tasa del 2.1 por ciento anual.
A la vez, hace dos años las remesas recibidas por nuestro país, registraron un máximo histórico de 33 470 millones de dólares, lo cual representó el 2.7 por ciento del producto interno bruto, de acuerdo con BBVA de México.
Por ello las conclusiones de la Conferencia Magistral sobre migración organizada por el Foro Nacional Permanente de Legisladores (FNPL) en la ciudad de México, son de gran interés. Partiendo además de la tradición del respeto al derecho internacional y desalentando la política de aislacionismo, porque el gran reto de México es la defensa de su soberanía.
Nuestro Estado ha sido proveedor de fuerza de trabajo hacia Norteamérica desde la década de 1950, identificándose varias regiones de nuestro estado expulsoras de mano de obra, las cuales posteriormente incursionaron a diversos estados del centro y norte de aquél país.
En nuestra Opinión se deberán impulsar programas económicos regionales con la contribución del Gobierno Federal y el trabajo reciente del Ejecutivo Estatal, en proyectos productivos, mejorando las condiciones sanitarias en primer término y ocupándonos de proyectos sustantivos que beneficien el empleo y la economía del campo y las ciudades.
Derivado de lo anterior en ésta fase crítica de la pandemia Covid-19 y en base a los procesos migratorios recientes, se han venido examinando las tendencias en los factores de comportamiento sobre éste tema económico y social, tanto en su dimensión interregional, como hacia los Estados Unidos de Norteamerica.