Zacatecas, Zac.- La titular de la Procuraduría General de Justicia en el Estado de Zacatecas (PGJEZ), Leticia Catalina Soto Acosta confirmó el hallazgo de seis a ocho cadáveres decapitados, mutilados y con desmembramiento en un total de siete fosas clandestinas localizadas por personal de inteligencia de la Policía Estatal Preventiva (PEP) el miércoles por la noche.

Señaló que se tienen plenamente confirmada la existencia de los cuerpos de seis personas, tres de los cuales ya fueron identificados, uno de ellos se trata de un agente de tránsito de Calera de 31 años de edad que fue privado de su libertad el pasado quince de junio, junto con un acompañante el pasado mes de junio, los cuales fueron ya entregados a sus familiares.

Soto Acosta explicó que de acuerdo a información de la PEP, al realizar operativo de inteligencia, localizaron un predio rústico ubicado en el ejido Pozo de Gamboa perteneciente al municipio de Morelos, Zacatecas, un lugar abierto, donde se localiza en primera instancia una acumulación de basura que ocultaba la presencia de siete fosas clandestinas.

En este lugar, informó, además de los montículos de tierra se encontró restos de basura humana, con rasgos de que hubo movimiento y presencia de personas en el lugar, casquillos de varios calibres y al hacer la inspección se encontraron  algunos cadáveres mutilados, decapitados y con desmembramiento. En algunos casos se ha identificado plenamente que esos pedazos de cuerpo humano corresponden a uno solo.

“Estamos en la identificación de tres de ellos, que corresponden a tres masculinos, dos de ellos desaparecidos en el mismo lugar, en el municipio de Calera el pasado 15 de junio, la familia ya había dado la información respecto de la desaparición de esos dos masculinos, los cuales se han identificado a través de los tatuajes que tenían en su cuerpo y ya han sido entregados a sus familiares”, comentó.

Asimismo, Leticia Soto refirió que un tercer cadáver ha sido ya identificado quien también había sido reportado como desaparecido y el cual también ya ha sido entregado a sus familiares y en estos momentos se está en espera de las pruebas de genética para identificar el resto de los cadáveres, uno de los cuales tiene ya reducción esquelética, es decir, ya únicamente se recuperó el esqueleto.

“Hasta este momento tenemos seguridad de que se trata de seis cuerpos probablemente de ocho, pero respecto a estos últimos restos humanos estamos esperando que las pruebas de genética nos indiquen que precisamente las extremidades corresponden a un solo cuerpo. Confirmamos entonces la presencia de seis cuerpos y se esperan los resultados genéticos de dos más”.

Mencionó que los primeros cadáveres tienen un diagnóstico de alrededor de 10 y 15 días de muerte, lo que coincide con la información, que tres de estas personas estaban reportadas como desaparecidas a partir del día 15 de junio y el otro que muestra reducción esquelética señala que el tiempo de muerte puede ser de entre seis y nueve meses.

Leticia Soto no descartó que se trate de ejecuciones relacionadas con el crimen organizado y destacó que por los indicios que tienen probablemente sea el lugar de muerte, porque los cuerpos están desmembrados y mutilados y por la localización de casquillos percutidos.

En el lugar de los hechos también fue encontrada documentación que pudiera pertenecer a quienes fueron privados de la vida, como una credencial de elector, credenciales de otra naturaleza e incluso una copia de una acta de nacimiento. “Todos estos indicios nos ayudarán para que las próximas horas podamos identificar plenamente a las personas y en su caso poderlos entregar a sus familias”.

Finalmente, la fiscal del estado indicó que se amplió la búsqueda en una zona más grande del predio para asegurarse que no hay algún otro enterramiento.