Zacatecas, Zac.- Bajo la magistral ejecución de la Orquesta Sinfónica de Aguascalientes y el acompañamiento vocal de la Compañía de ípera de Zacatecas, la Catedral Basílica de esta señorial ciudad fue marco perfecto para la interpretación de la âMisa de Réquiemâ de Wolfgang Amadeus Mozart.
Este concierto fue el último de la Temporada 2011 âOrquesta para todosâ de la Orquesta Sinfónica de Aguascalientes, antecedido por el que tuvo lugar el viernes 18 en la ciudad de Aguascalientes.
Aquí también se contó con la presencia de Román Revueltas Retes como director; así como de Silvia Rizo, Ana Caridad Acosta, Rodolfo Acosta y Roberto Bañuelos como solistas, además del Coro de la Compañía de ípera de Zacatecas.
El programa estuvo compuesto por obras del autor austriaco: el âAve Verum Corpus, KV. 618â y el âRéquiem, KV.626â esta última una de sus obras más conocidas, y que fue escrita basada en los textos latinos para el acto litúrgico católico que se ofrecía en las defunciones.
Así, ante un público heterogéneo que se postró frente retablo, de intervención contemporánea, del artista plástico Javier Marín, la obra de Mozart se desarrolló ante el beneplácito de los asistentes la tarde de este domingo, quienes a lo largo de más de 60 minutos se deleitaron con esta magna ejecución instrumental y vocal.
Cabe hacer mención que con este concierto, Zacatecas y Aguascalientes pretenden contar con un intercambio continuo de actividades artísticas culturales, para el enriquecimiento de ambas ciudades, ello, a través de las instituciones correspondientes como lo son los Institutos de Cultura de ambas capitales.
El programa abrió con âAve Verum Corpus, KV.618â; interpretada por las voces del la Compañía de ípera de Zacatecas para posteriormente dar paso al Réquiem, KV. 626; con sus movimientos: âRéquiemâ y âDies Iraeâ.
El cuarteto vocal se hizo presente en âTuba mirumâ; así como en âRecordareâ, âDomine Jesuâ y âBenedictusâ, predominando la excelente participación de los solistas en cada uno de los movimientos de la obra.
Por parte de las voces que componen la Compañía de ípera, interpretaron las partes: âRex Tremendaeâ, âConfutatisâ, âLacrymosaâ, âHostiasâ y âSanctusâ, y al finalizar los asistentes agradecieron el concierto con aplausos y de pie, haciendo que los cuatro solitas acompañados de la Orquesta Sinfónica interpretaran nuevamente âBenedictusâ.