Acorde con el compromiso establecido ante la sociedad, en la representación del primer informe de gobierno del alcalde Eduardo López Mireles y en base al acuerdo que sostuvo el Ayuntamiento, dieron inicio las comparecencias de funcionarios municipales ante el cuerpo colegiado, con la presencia en la sede del Ayuntamiento, del secretario de gobierno municipal Héctor Hugo Ramí­rez Escobedo y el encargado de la dirección de seguridad pública.

Luego de unirse a las felicitaciones y observaciones a los funcionarios por parte de los miembros del Ayuntamiento, el presidente municipal Eduardo López Mireles, destacó aspectos relevantes sobre todo en materia de seguridad pública, como el hecho de que la corporación haya crecido en integrantes de 132 a 144.

Destacó que Jerez es de los pocos municipios que tienen asegurados a sus elementos, con un seguro de vida y de gastos funerarios, entre otras prestaciones que se han logrado concretar en acuerdo con ellos, además de fomentar la buena relación entre el trabajador y la parte patronal, con acciones como el festejo en su dí­a, que a decir de los propios preventivos, por vez primera se les festejó de una manera decorosa.

López Mireles reconoció la necesidad de dotar de mejor equipo al personal de la dirección, sin embargo este año fue complicado realizar este tipo de inversiones, al verse limitado el rubro del fondo cuatro, debido a que el municipio se vio obligado a destinar 70 centavos de cada peso, para cubrir pasivos heredados y pese a ser la seguridad pública la segunda prioridad que se establece en la normatividad de este fondo, poco se pudo hacer, por tener que cubrir esos compromisos.

Sin embargo aseguró que para el siguiente ejercicio no existirá ningún inconveniente en materia de adeudos, por lo que podrá destinarse lo necesario para este rubro, no sólo en equipamiento, armamento y uniformes, sino que también se intensificará lo relacionado con la capacitación.

Finalmente el presidente garantizó que en el próximo proceso electoral, la policí­a municipal se concretará a sus funciones de garantizar que sea una elección ordenada, sin salirse de sus funciones, como ocurrió durante las votaciones del año 2010, cuando la hoy sí­ndica Elsa Duarte y su hija fueron perseguidas y detenidas, por los elementos que –está claro–, sólo recibieron órdenes superiores, que en este caso no se darán.