Fotos: Misael Camarillo / MIRADOR
Zacatecas, Zac.- Luego de que fuera desalojado del local que arrendaba, localizado en el mercado J. Jesús González Ortega de la capital del estado, el gerente del bar La Chopería interpuso una demanda penal contra el ayuntamiento capitalino, y en concreto contra el alcalde Carlos Peña, señalando que para dicho procedimiento no recibió notificación previa.
El desalojo se produjo el lunes pasado, agregó, y lo consideró un acto arbitrario en contra de las 25 familias que dependen económicamente del negocio. Dijo que como empresario ha pagado la renta del local, y mostró un documento en el cual el propio alcalde, así como el secretario del municipio, Alfredo Salazar de Santiago, reconocen la existencia de una tercera persona en el contrato de arrendamiento, quien es la propietaria del establecimiento.
Señaló que durante la diligencia no se identificaron quienes hicieron la actuación, y que no traían orden judicial alguna. Despojaron de mobiliario y algunos artículos, descomponiendo computadoras y monitores. Lo que pasó es “un desconocimiento total del presidente municipal de los fundamentos legales en este tipo de acciones”. Hay imágenes que se han presentado como prueba, aseveró.
Se puso la denuncia ante el Ministerio Público, dijo, misma que fue ratificada, en el sentido de que se le hace responsable penalmente. No es sólo hablar a los medios y decir cosas incoherentes y sin fundamento. Nos presentamos al público porque estamos cansados del gobierno que nos oprime, y si no tiene ni idea de lo que pasa no lo exime de sus actos.
En contraposición, señaló que esta situación posiblemente sea originada por una situación personal, ya que se le acusó de actos de corrupción supuestamente cometidos cuando fue director del Departamento de Ejecución Fiscal de la propia presidencia municipal, asunto en el cual, dijo, no se le ha comprobado nada.
Además, informó a los medios de comunicación que interpuso una demanda ante el Tribunal de lo Contencioso Administrativo del Estado, como trabajador, contra el alcalde, a propósito de su destitución como funcionario del ayuntamiento.
Agregó que, incluso, ha dejado de dormir debido a que no concibe que el alcalde, representante del ayuntamiento, se preste a este tipo de situaciones, ya que “el golpe no es para mí, sino para las cerca de 25 familias que dependen de ese empleo”, reiteró.
El presidente es incongruente, expuso, ya que da a entender que sus acciones están sujetas a Derecho, cuando hay lugares que operan sin licencia, “con respeto para los empresarios, pero es para aclarar la incongruencia de sus acciones”, recalcó.
Por último, convocó al presidente municipal para que le muestre la notificación que presumiblemente mandó a los dueños del negocio, recalcando que en ningún momento se le dio a conocer sobre el hecho de que el inmueble debería ser desocupado.
