Por: Manuel Ibarra Santos

ZACATECAS, ZAC.- La construcción de un buen año para Zacatecas, (que estará sujeto, no a un voluntarismo irreflexivo, y sí a una propuesta de actuación con visión estratégica) pasará incuestionablemente por la consolidación de la variable de la gobernabilidad y gobernanza política eficiente de los asuntos fundamentales de la sociedad zacatecana, así como por el combate adecuado de la violencia criminal. Lo anterior implica no distraer el camino.

Para lograr tal superior fin, al menos tres caminos se tendrán que recrear con atingencia: 1).-reconducir la vida política en un clima de plural unidad, no de confrontación; 2).-estimular la inversión pública y privada, como palanca del dinamismo económico; y 3).-consolidar los canales de comunicación y de gestión frente al gobierno federal de Andrés Manuel López Obrador.

Sustentar el sólido principio de gobernanza en Zacatecas, pasa necesariamente por la condición de mantener relaciones armónicas, de apoyo y cooperación con López Obrador y su administración.

Pero además, lo anterior significa que liberar las amarras de la sucesión 2021, sin ninguna estrategia de contención razonable, se traducirá en el riesgo de dinamitar el principio de gobernabilidad en Zacatecas, cuando existen en este momento otras prioridades, como la de apuntalar el crecimiento, el desarrollo, la generación de empleo, el combate a la inseguridad y la reducción de la pobreza.

El 2019 inicia mediado por la presencia de una singular paradoja. Por un lado, tenemos el escenario de la esperanza derivado por el comienzo de la administración de Andrés Manuel López Obrador, pero por el otro, nos encontramos con el contexto de un año muy complejo en lo económico.

El Banco de México nos ha anticipado que el 2019 pudiera ser un año difícil, caracterizado por la desaceleración económica, con una inflación arriba de lo tradicional y un dólar caro, por encima de los 20 pesos. El crecimiento se tasará conservadoramente apenas en un 2 por ciento anual, que será insuficiente para producir los empleos docentes que la población requiere.

De 1982 a la fecha, la economía mexicana ha crecido en promedio anual al 2 por ciento, cuando debiera de ser en estricto sentido al 7%, con la finalidad de generar las plazas de trabajo que la población demanda, en particular los jóvenes que egresan de las universidades.

¿Cómo estamos en el contexto internacional? La OCDE ha pronosticado que el crecimiento mundial en el 2019 se estancará y no será superior al 3.7%. Las naciones productivamente más dinámicas serán las de China e India, que seguirán significándose por ser las locomotoras de la economía en el planeta. La primera aumentará en un 6.4%, la segunda un 7.5%, en tanto la de Estados Unidos de Norteamérica crecerá cuando mucho al 2.7 por ciento.

EL ESCENARIO OPTIMISTA:

Todos los sondeos de los medios informativos especializados en asuntos económicos plantean un escenario optimista. La encuesta del Financiero publicada recientemente revela que el 79 por ciento de los mexicanos entrevistados aseguran que en el 2019 les ira bien. Sólo el 12% afirma lo contrario.

Los temas en los que les podría ir bien a los mexicanos y a la administración de AMLO, son los siguientes: 1) Transparencia y buen gobierno; 2) Asistencia social; 3) Política interna; 4) Seguridad; 5) Economía; y 6) Política exterior.

Los desafíos del gobierno de Andrés Manuel López Obrador se encuentran en concretar los cambios que ofreció a la población. En principio ha convertido en beneficiarios centrales del presupuesto público de este año, a los adultos mayores, a los jóvenes y a los grupos más vulnerables de la sociedad.

LOS DILEMAS Y RETOS DE ZACATECAS:

Atraer inversión pública y privada para impulsar proyectos de desarrollo estratégico en Zacatecas, será uno de los principales retos. Junto a eso, el afianzar la gobernanza, será el otro desafío