Zacatecas, Zac.- Vivimos un momento y una sociedad de suma violencia, donde el interés personal está por encima de la comunidad, una cultura de mucho egoísmo, y esa violencia social se proyecta en nuestras escuelas, que son cajas de resonancia. Lo que pasa en la sociedad pasa en nuestras escuelas y los conflictos que hay en problemas familiares se vienen a proyectar también en las escuelas, afirmó la mañana de este miércoles Gema Mercado Sánchez, titular de la Secretaría de Educación de Zacatecas (Seduzac).
Agregó que en los planteles educativos hay dinámicas propias que si no se manejan con profesionalismo hacen que esta caja de resonancia tenga un sonido más fuerte. Vemos un nivel de violencia grande en las escuelas, grande en la sociedad y todas las instituciones trabajan y hacen un esfuerzo en esta tarea tan grande de la sociedad, en la que se encuentra llamada a hacer una transformación cultural.
“Debemos pensar que donde hay desencuentros tenemos que establecer el diálogo, y donde se convoca a la guerra tenemos que llevar la paz”, dijo, a pesar de que se trata de una de las tareas cotidianas de las más pesadas.
Uno de los objetivos más grandes de la educación consiste en tener la posibilidad de que una persona viva más consigo misma y en paz con los demás, añadió.
Existen regiones de la entidad donde las circunstancias son diferenciadas, ciertos polígonos de mucho interés para su atención, en Fresnillo, Guadalupe y la capital, según estadísticas, y se coincide en cifran con el Inegi en cuestión de violencia intraescolar.
“Es un reto muy grande que forma parte del trabajo institucional de la secretaría, que se traduce en situaciones de todo tipo. Aproximadamente dos tercios de la población se siente vulnerable en las escuelas, con posibilidad de violencia, y hay 12% con registro directos y acusaciones de conflicto”.
Sostuvo que estos conflictos pueden ser entre los maestros, entre alumnos, e involucrar a padres de familia. Lo que se hace es dar una atención permanente a los conflictos para tratar de llevar una actitud de conciliación y de posibilidad de diálogo. “Hay algunos que requieren una intervención legal y jurídica mucho más rigurosa, en casos de agresiones tipificadas como delito, como el acoso sexual, o coma la violencia física, y se resuelven con intervención directa.
Se establecen medidas cautelares cuando se tiene una situación de conflicto grave para separar a las personas de esa condición de vulnerabilidad, y una serie de medidas. La más importante es el Programa Nacional de convivencia Escolar que permite realizar actividades tanto correctivas pero principalmente preventivas. Lo que se pretende es crear una cultura, dentro de nuestro currículum escolar, de la paz y de la resolución de conflictos, de la autoestima y el reconocimiento de la persona a su propia identidad y a la posibilidad de convivir con los demás. Hay acciones que se concluye, incluso, con acciones legales”.
En Zacatecas, informó, la agresión más frecuente es el llamado bullying, la burla, la denostación por la condición particular de la persona, por distintos factores, y la discriminación. Esto también tiene que ver con ese proceso de aprendizaje para la convivencia con los demás.