Zacatecas, Zac.-En esta temporada invernal, con el descenso de las temperaturas se es más propenso a desarrollar enfermedades respiratorias agudas, la gripe, influenza, catarro, dolor de oídos y garganta son las más comunes, llegando en algunas ocasiones a terminar en complicaciones como bronquitis y neumonía.
Everardo Adame Escañuela, director de la Unidad de Medicina Familiar No. 4 del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), informó que en otoño e invierno se reporta un incremento en los casos de infecciones respiratorias agudas (IRAS), debido a los cambios drásticos de temperatura.
Explicó que desafortunadamente y en la generalidad de los casos los pacientes recurren a la automedicación y sin contar con una valoración médica toman medicamentos que consideran adecuados, pero que no siempre benefician, sino por el contrario agravan los padecimientos.
Adame Escañuela subrayó que âes preocupante porque todavía no podemos erradicar los hábitos que teníamos de la infancia, las abuelas de antes siempre nos recomendaban tomar algún medicamento que consideraban surtía efecto para tener mejoría en relación al padecimiento, lo hace que el microbio se vuelva resistente y favorezca un proceso infecciosoâ.
A pesar de la difusión que se hace de forma permanente para evitar la automedicación continúan registrándose casos en los que al consumir medicamentos inadecuados el microbio cada vez es más difícil de eliminar y se tiene que utilizar medicina de segunda y tercera generación, aunado a la complicación del padecimiento.
Agregó que los cuadros gripales pueden atenderse en el domicilio con reposo y una alimentación adecuada, además de tomar medidas preventivas como abrigarse bien ante las bajas temperaturas y tomar bastantes líquidos, particularmente cítricos que favorecen las defensas del organismo.
Sin embargo, cuando este problema de salud prevalece por más de tres días y no se nota una mejoría con las medidas antes mencionadas, entonces es necesario acudir a revisión médica a la unidades medicina familiar que le corresponda, para que de manera oportuna le indiquen el medicamento y dosis adecuadas al padecimiento.