Zacatecas, Zac.- Al cumplirse 123 años del nacimiento de uno de los más grandes poetas latinoamericanos y, con justicia también llamado el “Prí­ncipe de los poetas mexicanos”, el pueblo y Gobierno del Estado le rindieron merecido homenaje en el conjunto escultórico de Francisco Zúñiga, sito en la avenida que lleva el nombre del propio Bardo jerezano.

La ceremonia con guardia de honor y ofrenda floral estuvo encabezada por el Gobernador Miguel Alonso Reyes; la Presidenta del Poder Judicial, Leonor Varela Parga; el Diputado Pablo Rodrí­guez Rodarte, presidente de la LX Legislatura; el alcalde capitalino, Arnoldo Rodrí­guez Reyes; estudiantes de primaria y demás autoridades civiles y militares, así­ como de la Banda Sinfónica de Zacatecas.

Con el homenaje que el dí­a 12 se le rindió en la ciudad de México, iniciaron formalmente las Jornadas Lopezvelardenas 2011 y, hoy, les damos puntual seguimiento, mismas que habrán de concluir el próximo domingo 19 en la ciudad de Jerez, dijo Gustavo Salinas íñiguez, director del Instituto Zacatecano de Cultura (IZC).

Recordó que ese dí­a se hará la entrega del Premio Iberoamericano de Poesí­a “Ramón López Velarde” al poeta mexicano Vicente Quirarte, ceremonia  con la que también recordaremos el 90 aniversario del fallecimiento del propio prohombre zacatecano, así­ como el nonagésimo de la creación de la “Suave Patria”.

Explicó que por primera vez estas Jornadas Lopezvelardeanas 2011 trascienden el territorio zacatecano y se extienden a otras entidades del paí­s, donde López Velarde vivió y se desarrolló como persona, profesional del Derecho y poeta: Aguascalientes, San Luis Potosí­, Jalisco y el Distrito Federal.

Durante el homenaje de hoy, el poeta zacatecano Javier Acosta Escareño afirmó que López Velarde escribió grande poemas durante su vida, que transformó la poesí­a y engendró la modernidad poética de México.

Dio la casualidad que al morir nació la “Suave Patria”, el gran poema de la patria y, en cierta forma, es la patria engendrada por la poesí­a, patria cantada, patria soñada por López Velarde.

Así­ -dijo- como tenemos el poema paterno, el himno nacional y marcial, tenemos el poema materno, terso, amoroso, de la “Suave Patria”.

Acosta Escareño consideró que la “Suave Patria” no es un poema de comienzos del Siglo XX, del México de los recuerdos, sino que está como los sueños, fuera del tiempo. Su proeza es sencilla y titánica: pone de acuerdo el microcosmos y el macrocosmos, aseveró.

López Velarde actúa como un médium civil e í­ntimo, que pone en contacto las imágenes más cotidianas con la belleza más trascendente: La plácida atmósfera de la aldea y el tráfago de la ciudad, y los transforma todos para revelarnos la sencilla majestad de la vida, destacó el poeta que hizo uso de la voz en el evento de hoy.

También dijo que el poema de López Velarde es grande y es í­ntimo; que es público y privado; frágil y potente y, es, como el sueño, partidario de la vida. López Velarde nos enseña que es necesario soñar e imaginar para comprender y construir la patria que todaví­a podemos amar.

í‰sa es la poesí­a, la potencia de soñar, es decir, de transformar nuestro paí­s en la patria de nuestra esperanza. Ramón López Velarde nos enseña que para vivir es necesaria la poesí­a, puntualizó el poeta zacatecano Javier Acosta Escareño.