El Sol de Zacatecas
Redacción
Fresnillo, Zacatecas.- De la fosa de aproximadamente 100 metros de profundidad, en el Pardillo I, fue rescatado un tercer cadáver, quien de acuerdo a informes de la Policía Ministerial del Estado de Zacatecas (PME), respondía al nombre de Rubén Esquivel Pacheco, de 40 años de edad, originario del municipio de Calera de Víctor Rosales.
Aunque todo aparenta que este triple homicidio fue obra de integrantes del crimen organizado, serán las investigaciones que lleve a cabo la Procuraduría General de Justicia del Estado, las que dejen en claro porqué motivo fueron victimadas estas personas y por quiénes.
El sábado anterior fueron rescatados los cuerpos sin vida de Omar Edgar Hernández Hernández y Efraín Torres Muro de 36 y 29 años de edad respectivamente, sin embargo, por informes que tenía la Policía Ministerial, existía la presunción de la existencia de más cuerpos abandonados en ésa fosa, ubicada en campo abierto, cerca de la comunidad del Pardillo Tercero.
En el lugar de los hechos, elementos de la Dirección de Servicios Periciales, levantaron casquillos percutidos, así mismo, se encontraron manchas de sangre, lo que hacía suponer a los investigadores, que los tres fueron asesinados en ese mismo lugar antes de ser arrojados al hoyo.
RESCATE COMPLICADO
A causa de la inmensa profundidad y lo reducido del diámetro, que era de aproximadamente 40 centímetros, las tareas de rescate del tercer cadáver se tornaron sumamente difíciles.
Dos valientes jovencitas del Departamento de Protección Civil, en un claro cumplimiento del deber y respaldadas por todo un equipo de la misma dependencia, descendieron en diferentes momentos, una lo hizo en un par de veces, y en su segundo descenso logró amarrar con una soga los pies del cuerpo para de esa forma tratar de trasladarlo a la superficie, pero para su mala suerte y la de todos los presentes, la soga se zafó, derrumbándose así las esperanzas de ese intento por extraer el cadáver.
Pero esta situación adversa no mermó en lo absoluto el ánimo de rescatistas y ministeriales por llevar a cabo su propósito, y un agente ministerial se ofreció para bajar, y debido a su complexión delgada del policía, no hubo objeción para que lo hiciera.
Luego de recibir algunas indicaciones por parte de los expertos, el investigador fue deslizado hasta las profundidades del hoyo, y después unos minutos de maniobras trabajosas, consiguió con una soga amarrar los pies del cuerpo fuertemente, que se hallaba boca abajo, y finalmente a las 19:00 horas se logró el objetivo de sacar el cadáver a la superficie.