La agricultura orgánica es un sistema de producción que trata de utilizar al máximo los recursos de la finca, dándole énfasis a la fertilidad del suelo y la actividad biológica y al mismo
tiempo a minimizar el uso de recursos no renovables reduciendo o eliminando el uso de fertilizantes y plaguicidas sintéticos para proteger el medio ambiente y la salud humana.
Recibe diversos nombres: Orgánica, biodinámica, natural, alternativa, regenerativa ó biológica, sin embargo, todas ellas tienen características muy similares entre otras las siguientes:
- Fomentan y retienen la mano de obra rural ofreciendo una fuente de empleo permanente.
- Eliminan el uso y dependencia de plaguicidas, fertilizantes, fungicidas y otros productos sintéticos cuyos residuos contaminan las cosechas, el suelo y el agua.
- Favorecen la salud de los agricultores, los consumidores y el entorno natural, al eliminar los riesgos asociados con el uso de agroquímicos artificiales y bioacumulables.
- Dan importancia preponderante al conocimiento y manejo de los equilibrios naturales encaminados a mantener los cultivos sanos, trabajando con las causas por medio de la prevención y no con los síntomas.
- Entienden y respetan las leyes de la ecología, trabajando con la naturaleza. 9 Protegen el uso de los recursos renovables y disminuyen el uso de los no renovables.
- Reducen la lixiviación de los elementos minerales e incrementan la materia orgánica en el suelo.
- Trabajan con tecnologías apropiadas aprovechando los recursos locales de manera racional.
En México, los principales estados productores de alimentos orgánicos son Chiapas, Oaxaca,
Michoacán, Chihuahua y Guerrero, que concentran 82.8% de la superficie orgánica total. Tan
sólo Chiapas y Oaxaca cubren 70% del total.
En el país se cultivan más de 45 productos orgánicos, de los cuales el café es el más importante por superficie cultivada con 66% del total que equivale a 70 mil 838 hectáreas y una producción de 47 mil 461 toneladas.
En segundo lugar se ubica el maíz azul y blanco con 4.5% de la superficie equivalente a 4 mil 670 hectáreas y una producción de 7 800 toneladas; y en tercer lugar está el ajonjolí con 4% de la superficie, igual a 4 mil 124 hectáreas y una producción de 2 433 toneladas.
A estos cultivos les siguen en importancia las hortalizas con 3 831 hectáreas; el agave con 3 mil 47 ha; las hierbas con 2 mil 510 ha; el mango con 2 mil 75 ha; la naranja con 1 mil 849 ha; el frijol con 1 mil 597 ha; la manzana con 1 mil 444 ha; la papaya con 1 mil 171 ha, y el aguacate con 911 hectáreas.
También, aunque en menor superficie, se produce soya, plátano, cacao, vainilla, cacahuate, piña, jamaica, limón, coco, nuez, lichi, garbanzo, maracuyá y durazno.
Otros tipos de productos que también se obtienen con prácticas orgánicas son: miel, leche, queso, pan, yogurt, dulces y cosméticos.
Cabe mencionar que la SAGARPA y el Gobierno del Estado de Chiapas con asistencia técnica proporcionada por técnicos del Proyecto Estratégico de Seguridad Alimentaria (PESA) de la FAO, apoyan la reconversión de sistemas de producción convencional de maíz de autoconsumo a sistemas de producción orgánica, asociados con otras especies como calabaza, frijol y chile en 50 mil hectáreas.
Con Información de : http://grupoinformador.com.mx/